Elección del emplazamiento
Los datos meteorológicos precisos dependen de seleccionar una ubicación que minimice la interferencia ambiental. La estación debe colocarse en un área abierta y nivelada, alejada de obstrucciones como edificios, árboles o fuentes de calor (p. ej., pavimento, respiraderos, cuerpos de agua) que podrían distorsionar las lecturas de temperatura, viento o precipitación. El césped o el terreno natural son ideales para los sensores de temperatura, mientras que los instrumentos de viento requieren una exposición despejada a los vientos predominantes.
Priorice la accesibilidad para el mantenimiento y las reparaciones, equilibrándola con las necesidades de seguridad: seleccione un lugar visible pero seguro para disuadir el vandalismo, como dentro de una propiedad cercada o en áreas monitoreadas. Monte la estación en un poste resistente y a prueba de manipulaciones (p. ej., acero fijado en concreto) y considere usar gabinetes con cerradura para la electrónica.
Una ubicación cuidadosa minimiza los efectos del microclima y garantiza que los datos se alineen con los estándares meteorológicos oficiales, mejorando la confiabilidad para el análisis o las comparaciones.
Última actualización
¿Te fue útil?